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Tour Drama y Luz (56)
Hidalgo, Texas 03 de Abril 2012
HIDALGO: Maná hace sonar el ritmo latino
Como un homenaje y estímulo hacia el pueblo latino, el grupo Maná arrancó con gran éxito su gira “Drama y Luz World Tour 2012”, presentándose el pasado martes ante miles de fanáticos, en el State Farm Arena de Hidalgo.
La banda de rock mexicano, integrada por Juan en el bajo, Sergio en la guitarra, Alex en la batería y Fher en la voz, deleitaron al público con sus melodías, principalmente de su más reciente álbum Drama y Luz, mismas que fueron coreadas por los congregados quienes se mostraron felizmente cautivados por el concierto.
Una enorme manta separó el escenario del público durante el arranque del recital. Las voces y aplausos subieron de volúmen al percibir el sonido de guitarras eléctricas acompañadas de un grave bombo.
Con un grito del vocalista Fher, inició el grupo a entonar “Lluvia Al Corazón”, permitiendo ver a la banda entre sombras por la gran cortina separadora, que al final de la canción fue removida.
Los fanáticos recordarían viejos tiempos, al escuchar ecos de los años 90’s con melodías como “Rayando El Sol”, “Como Quisiera”, “Te Lloré Todo Un Río”, “Clavado En Un Bar”, entre otras.
Con las cantos del nuevo disco, Maná hizo vibrar a su público de romanticismo con “Amores Clandestinos” y “El Verdadero Amor Perdona”.
Los integrantes de la banda lucieron emocionados y dispuestos a entregarse durante todo el concierto.
Con una copa en mano, el vocalista brindó por la noche musical.
“Voy a hecharme un vinito en su salud”, mencionó Fher levantando su cáliz.
Dedicando también una canción a “todos aquellos que les gustan las mujeres malas”, expresó previo al sonido de “Mariposa Traicionera”.
Imágenes de distintos lugares, de gente de América Latina y sus banderas, fueron proyectadas en las pantallas gigantes del recinto, seguido por un grito del baterista Alex diciendo: “¡Que vivan los latinos!”.
Con maracas en mano y pisando a ritmo del son, Fher entonó “Corazón Espinado” para luego dar paso a Alex, quien desde su set de percusiones cantó “Me Vale”, junto a un guitarrista invitado ganador de un concurso.
Los tambores y platillos resonaron, asimismo, durante un sólo de batería que duraría aproximadamente 10 minutos. Sorpresivamente, la tarima donde estaba asentado el instrumento comenzó a elevarse mientras Alex hacía gala de su habilidad musical.
Al estar por encima de unos cuatro metros, la plataforma giró hacia izquierda y derecha dejando las miradas atónitas de los presentes que no dejaron de aplaudir. Al finalizar el singular espectáculo regaló sus baquetas arrojándolas hacia los espectadores.
Fher, Sergio y Juan se encontraron con algunos de sus instrumentos en la parte posterior del recinto, justo arriba de los ingenieros que controlan el audio, quedando muy cerca de sus admiradores.
Desde ese lugar interpretaron varias canciones, e invitaron a una joven del público de nombre Sarahí, a quien el vocalista le cantó al oído, bailando con romanticismo.
Al regresar al escenario principal, el cantante manifestó su sentir acerca de estar entre una gran audiencia de latinoamericanos.
“Estamos muy contentos de estar aquí en Estados Unidos, y en este lugar que nos fue robado y que vamos a recuperar pacificamente”, dijo desde la tarima antes de sacar una bandera de México que ondeó por todo el escenario.
Después de más de dos horas de concierto los integrantes de Maná se retiraron del escenario, sin embargo, la gente permaneció de pie pidiendo con aplausos el regreso de la banda.
La guitarra de Sergio alzó su sonido una vez más para interpretar “Labios Compartidos” y “En El Muelle De San Blas”, para despedirse finalmente con un “buenas noches”.